Hoy les queremos acercar un poco más al origen de nuestra materia prima, vamos a hablar sobre nuestra finca y de la variedad de olivos que encontramos en ella.
La Rueda Casa Baja, tiene una superficie de 600 hectáreas dedicadas por completo al olivar y donde tenemos plantados cuatro variedades de olivos, Picual, Hojiblanco, Arbequino y Manzanillo Sevillano. Es muy típico en nuestra región encontrar las tres primeras variedades, de hecho todos estamos muy familiarizados con el sabor y aromas de éstos AOVEs, en cambio, tener una extensión tan grande de la variedad Manzanillo Sevillano es una de las grandes particularidades de nuestra explotación agrícola.
Nuestra finca, en origen, estaba destinada en su mayor parte a la producción de aceituna de verdeo, o mesa como comúnmente se la conoce. Fernando Ruiz, conocedor de la demanda y requerimientos gustativos del mercado del AOVE en países extranjeros, apuesta por ésta variedad, que aunque comúnmente no es utilizada para la obtención de aceites debido a su bajo rendimiento, nos brinda un producto de altísima calidad y de sabores y aromas que recuerdan mucho al fruto de mesa que todos conocemos.
Conseguimos así producir, un zumo que por su equilibrio y agradable sabor es del beneplácito del mercado nacional e internacional.
Jugamos hoy audiovisualmente con las dos suertes que corre nuestra querida variedad manzanilla Sevillana. Admirada por unos como agradable aperitivo y por nosotros por su excelso AOVE.